¿Cómo divorciarse de las deudas?

Contenidos

Las relaciones ciertamente pueden ser complicadas. En ellos tenemos momentos de felicidad y felicidad, es lo principal cuando compartes tu vida con otra persona.

Imagina que todo sale mal en tu vinculación y cuanto más te interesaría mejorar la situación con tu pareja, más frustrado estás por no lograrlo debido a que parece imposible, pero tampoco te atreves a dejar esa vinculación, ¿verdad? ¿te pasó?

Ahora, ¿qué pensarías si te dijera que lo que acabas de leer además pasa con tus finanzas?

Especialmente con las deudas, si estás en una situación complicada probablemente ya te hayas identificado. Y, desde luego, así como planea separarse de su pareja, ¿quién no querría divorciarse de sus deudas?

Pero, ¿cómo podemos divorciarnos de ellos sin acabar malversados? Tenemos que acabar con ellos en buenos términos o inclusive, ¿por qué no? Danos otra posibilidad con un nuevo crédito. Las deudas aparecen en nuestra vida no sin esperarlas, al contrario somos conscientes, es necesario comprender su alcance y cómo podemos superarlas, fundamentalmente para comprender cómo funciona una tarjeta de crédito.

Hay 4 tipos de deuda:

  • Por gasto de hormigas en el que caen personas que no disponen una administración en sus finanzas y recurren a pequeños créditos pero que después no pueden cubrir.
  • Qué es «imitador» Es uno que las personas adquieren para llevar una vida más allá de sus posibilidades.
  • Cuando se trata de supervivencia Con él, la gente intenta llegar a fin de mes (para endeudarse, la gente utiliza el recurso para cubrir necesidades básicas como alimentos, medicinas y vivienda, al mismo tiempo de no gastar en lujos).
  • El del emprendedor que se utiliza para invertir en un negocio o iniciativa.

El comienzo siempre es bueno

Todo comienza cuando compras una tarjeta de crédito. Al comienzo de la vinculación, se desarrolla un sentimiento de comodidad. Te dejas llevar por lo fácil que es utilizarlo para tus compras, tales como: satisfacer necesidades, pagar gastos, complacer.

Pero, lo bueno viene después Y es cuando llega la sensación de frustración, justo en el momento en que debe liquidarse y por múltiples motivos como: paro, gastos imprevistos, mala gestión de sus finanzas, enfermedad

No acaba aquí, lo que viene es que:

En el mismo momento en que te das cuenta de que has dejado de pagar lo que corresponde, indudablemente aparecerá la presión de un tercero, en esta circunstancia el banco o un poco amigo agente de agencia de cobranza.

¿Cómo divorciarse de las deudas?

Si estás en una situación en la que la situación es estresante y sientes que ya no verás la luz al final del túnel, lo primero que debes hacer es tener paciencia y seleccionar muy bien los pasos que darás para salir. De ahí.

Toma esto como una advertencia:

Un clavo no saca otro clavo, Por tanto, cancelar un préstamo con otro préstamo no es la mejor opción, te involucras en una vinculación más complicada que la anterior, convirtiéndote en un círculo vicioso, a menos que tu deuda esté en buen estado y decide realizar una consolidación.

Para saber cómo «divorciarse» de las deudas, primero:

  • Entiende que no existe un «divorcio expreso», es como ir al médico cuando estás muy enfermo. Si no hay un esfuerzo constante para curarse, no tendrá éxito.
  • Dale un giro a tus finanzas personales, esto te ayudará a realizar un seguimiento de tus gastos y descubrir cuáles son una pérdida de dinero.
  • La demarcación de tus obligaciones no es una alternativa, si verdaderamente estás interesado en pagar lo que debes, lo mejor sería buscar ayuda para llegar a una buena negociación con el banco y saldar tu deuda para comenzar a sanear tus finanzas y así continuar. con tu vida con toda la tranquilidad del mundo.

Dado que pasó por esa evaluación, determine si:

  • Si su deuda es de hasta 30 mil pesos, es una deuda “pequeña” que se puede controlar. Si echa un vistazo a sus finanzas y decides reordenarlos, podrías generar menos gastos y más ahorros para liquidarlo.
  • Tus cuentas siguen vigentes, pero no podrás aguantar mucho tiempo y te interesa no afectar tu historial crediticio debido a que es muy bueno, lo mejor es que logres consolidar tu deuda.
  • Cuando las cosas se pongan difíciles, acércate con un reparación de crédito para ayudarte en diferentes aspectos como: ahorrar para pagar, obtener una rebaja sustancial para la liquidación de tu deuda.

Divorciarse de las deudas es complicado al principio, poco a poco recuperarás el ritmo de tu vida y te aseguro que tu tranquilidad en ese primer día sin deudas no tendrá precio.

Suscribite a nuestro Newsletter

No te enviaremos correo SPAM. Lo odiamos tanto como tú.